miércoles, 31 de octubre de 2012

Sencillo homenaje

Sin pretensiones.
Solo mantener el recuerdo.
Una pared encalada como lápida común para dos perímetros delimitados por sendas hileras de ladrillos
blanqueados, cada uno con su cruz  y unas flores (de plástico).
No creo que sea necesario nada más, y seguramente de algunos elementos podría prescindirse.
Es solo mantener el recuerdo.
Evitar que durante el verano el polvo cubra el polvo y las lluvias del invierno salpiquen la memoria con barro.
Los recuerdos se irán transformando desde aquellos iniciales de dolor, pena o rabia, hasta otros más serenos,
mejores, más sosegados.
De unos o de otros, todos mantenemos los nuestros.


DSLR, 17-50 mm. f2,8 a f18 - 1/90s. ISO 200 -0,33 EV

2 comentarios:

  1. A veces, ni siquiera ligados a un lugar físico... Abrazos.

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    1. Efectívamente, Salomé, a veces, ni siquiera ligados a un lugar físico.
      La mayoría de las ocasiones, esas ligaduras son las que primero se sueltan porque ya no forman parte de lo que vivimos, y son las otras las que se mantienen vivas en nuestra memoria.
      Un saludo.

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SE CRÍTICO CUANDO COMENTES Y RESPETUOSO SIEMPRE.